Hablemos de la Constitución, entonces.
"Que no se diga que necesitamos una nueva constitución hacia la cual hay que salir. Esa constitución ya la tenemos: son los actos fundamentales de marzo".
(Mariano Grondona, Carta Política, abril de 1978)
La reelección indefinida no escandalizaba al Doctor cuando el gobierno de facto de sus socios de fe y de clase decidía sobre el tiempo electoral y sobre el tiempo de vida de sus prisioneros. Lo escandaliza pretextuosamente ahora, aunque esa hipótesis carezca de verosimilitud, con el objetivo no declarado de obligar al enemigo a mostrar sus cartas y poder así apuntar cañones y obuses contra el posible candidato a la sucesión. La Guerra Santa contra la continuidad de la 'impostura' democrática ya fué desatada, los Caballeros de la Orden de la Vaca necesitan un objetivo concreto para aniquilarlo y poder así restablecer su Orden del Privilegio.
–Mariano, ¿es cierto lo que se rumorea: que grupos armados entran a las casas y matan sin piedad?– le preguntaron.
–Sí. Y no me sorprende –contestó Grondona. Hace mucho tiempo que están haciendo esta clase de operativos. Yo mismo estaba al tanto, hace años, de todo eso.
–¿Son paramilitares?
–Me han dicho que ahora la táctica que utilizan es diferente. Parece que llaman a cada oficial para que se actúe en determinado operativo. Hasta los de administración son convocados, de noche o de madrugadas. Así todos se comprometen a actuar en el sistema. Para que haya solidaridad, todos se tienen que manchar las manos con sangre.
(Testimonio de Maud de Cox, esposa del director de The Buenos Aires Herald, David Cox, asistentes a la cena en que Grondona hizo esas declaraciones, en “El Doctor”, de Martín Sivak)La dictadura cívico-militar está siendo juzgada, pero la pata cívica aún da lecciones de civismo por la cadena nacional de medios privados.